Muestra de ‘El extraño caso del Dr. Jekyll y Mr. Hyde’

Título: El extraño caso del Dr. Jekyll y Mr. Hyde

Autor: Robert Louis Stevenson

Fuente: Amazon

Veredicto: No

He dicho que no a este libro porque —para desgracia de la historia que alberga— contiene la peor edición digital que he visto en años. Empezamos por una cubierta en la que no se han molestado en traducir el título¹⁾En todo momento hablo de la versión para kindle, diferente de la edición en tapa blanda o dura., seguida de varias páginas donde el formato cambia continuamente.

Queda patente que no se han molestado en revisar el resultado de trasladar el texto a formato digital: las sangrías en los párrafos es aleatoria, así como la distancia del salto de línea, y numerosas palabras aparecen cortadas por un guion en mitad de una línea (sin llegar al margen). Da algo de vergüenza cobrar por esto; demuestra muy poco respeto por el lector y por la obra del autor.

Sigo interesada en hacerme con El extraño caso del Dr. Jekyll y Mr. Hyde, pero esperaré a dar con una edición decente (y con una buena traducción, algo que parece más complicado con los clásicos que con el resto de libros).

La historia empieza presentándonos a Mr. Utterson, un abogado bondadoso y serio, apreciado por sus semejantes, al que un día paseando le narran una extraña historia. Su amigo y pariente lejano, Mr. Enfield, le cuenta que un día volviendo a su casa de madrugada presenció cómo un hombre siniestro chocaba contra una niña pequeña en la calle y siguió caminando, sin inmutarse al dejar a la pequeña llorando. Él se lanzó en busca del hombre y lo arrastró a la fuerza hacia la niña, rodeada entonces por sus familiares.

Llamaron a un médico para verificar el buen estado de la niña y reclamaron al tipo una compensación. El hombre, que les provocaba sentimientos de rechazo a todos pese a no tener ninguna característica física en particular que despertara dicha repulsión, accedió a entregarles 100 libras. Entró en una casa de aspecto ruinoso (frente a la que paseaban Mr. Utterson y Mr. Enfield en esos momentos) y salió de ella portando un cheque firmado a nombre de otra persona. Dicha persona era alguien muy respetado y conocido por la comunidad, por lo que a Mr. Enfield le resultó sospechoso que el tipo siniestro guardara alguna relación con él y dedujo que el firmante estaba siendo  chantajeando por el rufián.